viernes, 23 de febrero de 2007

El fluir del tiempo


Lo cierto es que las cosas de palacio van despacio. A finales de junio o principios de julio nacerá mi primer nieto. Nunca he estado tan contento como ahora. Menos mal que no tengo que tener el libro terminado para esas fechas.

El trabajo de mi libro es arduo, pero me encuentro con sorpresas agradables: Unas clases de escritura medieval con cálamo y otros útiles sobre papel y pergamino, orgqanizadas por AFEDA (Asociación para el Fomento de la Encuadernación de Arte) con 10 plazas. Me llamarán cuando se haya completado la suscripción.

Ayer se me pasaron las horas volando en clase de encuadernación. Me gusta mucho cómo se desarrollan y cómo son los compañeros. Estoy contento de haberme apuntado y de no dejar las clases de cerámica.

Tengo que enterarme de cómo se cosían los cuadernos en la Edad Media aunque yo no vaya a coserlos de igual modo. También tengo que elegir los herrajes del cierre del libro. Con esto de que la palabra herraje la he mirado en el diccionario de la real academia de la lengua española y no viene he estado dando un vistazo al libro En torno a la encuadernación y las artes del libro. Diez temas académicos, de Emilio Brugalla Turmo. El caso es que desde que compré este libro no había descubierto que viene perfectamente ilustrado el cosido de los cuadernillos de pergamino con la fotografía que se acompaña. Y me entero de que "entrando y saliendo el hilo en diferentes puntadas, se enroscaba con tres o más nervios puestos en perpendicular en el lomo. Nervios auténticos de buey debidamente adobados y endurecidos" y de otros interesantísimos extremos que se explican en la página 418 del libro citado de donde he copiado la cita entrecomillada más arriba.





jueves, 22 de febrero de 2007

Más de dos meses sin publicar...



Bien, está claro que a mi el tiempo me trata distinto que a la mayoría de la gente. A todos nos pasa igual.

El libro de abajo es el de Gödel, Escher, Bach, un Eterno y Grácil Bucle. Y el de arriba Terapia, de David Lodge, que leí el 23 de septiembre de 1996. Me pareció estupendo. Luego he visto que escribe también obras como "La conciencia y la Novela" que me compré hace algún tiempo y aún no he podido leer.

Ayer estuve viendo anochecer sobre la Gran Vía y la calle de Alcalá desde el estudio de grabado del Círculo de Bellas Artes. Estoy contento de haber ido. Es la primera vez que utilizo sus talleres después de que hace años que soy socio.

Esta tarde, en clase de encuadernación, he recogido el primer tomo de don Quijote, que Julia, mi profesora, estaba reparando. Ha quedado estupendo. ¿Cuál habrá sido la vida de esos tres tomos (un estudio y las dos partes del Quijote) para que estuvieran en tan mal estado?

Esta semana me ha pasado volando. Hace tiempo que no me ven el pelo por la Biblioteca Nacional. Vale la pena ir.